A Kristofer le encanta Bolivia. Si por él fuera maña mismo haría las maletas y a viajar. Estuvo dos veces en Cochabamba y recuerda como si fuera ayer. Ahora está ocupado en prepararse para escoger un buen gimnasio (Colegio) cuando le toque elegir la vía para una profesión, quisiera ser piloto civil, su fuerte son las matemáticas, los idiomas. A sus años es un experto en computación se maneja programas y búsqueda que muchos adultos no podemos lograr. Aquí lo vemos con las primos Johannes, Valentina, Vanessa, con el padre, la madre, la abuela, la hermana Sandra, de frack en ocasión de la boda de Thomas y Bachi. Imborrables recuerdos y vendrán otros.